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La más reciente publicación emitida por ONU Hábitat, programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos que tiene el objetivo de promover ciudades y pueblos social y ecológicamente sostenibles, reconoció la labor realizada por el Instituto Municipal de Planeación de León (Implan) en conjunto con vecinos de la colonia Valle Delta, como una de las experiencias que aportan conocimiento en la implementación de espacios de convivencia social. “El propósito de esta publicación es incitar la reflexión sobre los procesos de participación implementados durante la pandemia por la COVID-19 en Iberoamérica y el Caribe para identificar aprendizajes que, trasladados a la cotidianidad y a futuras crisis, ayuden a mejorar la vinculación, el acceso y la inclusión en los procesos de participación de proyectos de diseño urbano y espacio público, destacando el potencial radical de la participación para hacer de las ciudades lugares más sostenibles, habitables y justos para todos y todas, incluso en momentos de crisis” remarca la edición.
Así, el documento “Participación comunitaria en proyectos de espacio público y diseño urbano durante la pandemia”, recoge experiencias de diversas latitudes, presentando las acciones emprendidas por sectores sociales para hacer frente a los retos emanados por la crisis sanitaria desde la visión del espacio público y su importancia. Y es precisamente en el repositorio digital de la divulgación donde se hace referencia al ejercicio realizado por Implan en coordinación con vecinos y usuarios del parque de barrio ubicado en la colonia Valle Delta, como una muestra de las aproximaciones, metodologías y aprendizajes que, al ser estudiados, podrán nutrir la implementación de otros proyectos.
Dicho proyecto se ejecutó siempre de la mano de representantes de la sociedad civil, bajo un sistema de escucha y diseño participativo que permitió conocer de primera mano las necesidades, requerimientos y sentir de quienes son los actores principales del espacio público. Esta práctica logro la proyección de acciones que se vieron reflejadas, no solo en la adecuación de infraestructura, sino en la creación y reforzamiento del sentido de pertenencia, identidad y valorización de un espacio destinado para el bienestar colectivo. Es así como el esfuerzo de los colonos y beneficiarios del espacio ahora se ve reconocido por la instancia internacional junto con prácticas realizadas en lugares como España, Colombia, Perú, Uruguay, Bolivia, Argentina, Chile, Ciudad de México, Jalisco, Nuevo León, Quintana Roo y Tamaulipas.
